Este año que casi culmina deja
huellas imborrables en nuestras vidas y corazones, muchas cosas ocurridas nos
dan un sabor exquisito en el alma. Bolivia fue testigo de muchos
acontecimientos pero uno de los más importantes es y será siempre nuestra
ADAF-BOLIVIA, digo nuestra porque como nicaragüense me siento parte de ustedes
gracias al amor y entrega que me han transmitido en sus propuestas
coreográficas.
En este 2015 se han cumplido 16
años de visión, acción y proyección artística de una de las agrupaciones más
importantes de Bolivia. ADAF, sin lugar a duda, es una fuente valiosa de
manifestaciones culturales puesto que refleja en cada una de sus hermosas
danzas a un pueblo boliviano multiétnico y pluricultural.
ADAF consciente de la necesidad
permanente de buscar la significación e identificación de sus raíces, fortalece
su trabajo creativo como aporte y defensa de la identidad de la cultura, no
solo boliviana, sino latinoamericana.
La danza, como cualquier otra
actividad del hombre, nos permite sensibilizar al ser humano; de ahí se puede
reflejar la gran necesidad de que nuestros niños, jóvenes y adultos incursionen
en ella. ADAF, en cada una de sus propuestas coreográficas, nos permite
descubrir una conexión entre el cuerpo y el espíritu (fusionando emociones y
estados de ánimos) lo que le ha permitido recibir el maravilloso regalo de los
aplausos, comentarios y críticas positivas que realmente reconfortan el
espíritu.
ADAF permite una conexión entre las
raíces locales y latinoamericanas puesto que al apreciar un espectáculo de tan
alta calidad nos identificamos (sin importar la nacionalidad) con nuestras
raíces, ritmos, costumbres y tradiciones. Por lo tanto, su variedad en escena y
su calidad son elementos necesarios y más que suficientes para motivarnos a
seguir construyendo, pero sobre todo conservando, nuestra identidad para
preservarla, cultivarla y difundirla.
La danza es indiscutiblemente un
arte muy importante en nuestras vidas, está llena de creatividad y por ser una
actividad humana está sujeta a cambios, transformaciones paulatinas y
evoluciones. Por lo tanto, debemos como: bailarines, coreógrafos, directores y
músicos descubrir día a día en nuestro alrededor un elemento de la danza en
nuestra parte subjetiva, en nuestra gente, en sus problemas, en las vivencias,
en lo positivo y lo negativo, en lo interno y externo, todo ello con el
objetivo de crear, crear constantemente para expresar emociones ancestrales.
ADAF a través de sus creaciones ha
adquirido derechos y originalidad, gracias a su creatividad y su ingenio ha
aportado, fortalecido y defendido su identidad como nación boliviana y nuestra
identidad latinoamericana. Sus espectáculos han permitido crear espacios de
encuentros e intercambios, los cuales se transforman en momentos para conversar
y apreciar la riqueza cultural de nuestros países y poder ver que cada uno tiene
un maravilloso potencial que nos hace sentir orgullosos como pueblo
latinoamericano.
ADAF para mí constituye una expresión
cultural auténtica y creativa que engloba: costumbres, creencias y tradiciones
de ese hermoso pueblo boliviano; por lo tanto, se convierte en una agrupación
interesada y comprometida en la constante lucha de cuidar sus valores
nacionales.
Muchas gracias maestro Roberto
por inculcar en cada niño, joven, adulto, padre de familia, profesores,
bailarines, coreógrafos y público en general el amor hacia nuestras
tradiciones, infinitas gracias por hacernos sentir parte de su pueblo al ver
proyectadas sus costumbres en esas hermosas coreografías y sobre todo gracias
por hacernos siempre el llamado a conservar, promover, fomentar y difundir, más
allá de nuestras fronteras, nuestras manifestaciones culturales y artísticas
como elementos esenciales de identidad.
Espero algún día tener la dicha
de reunirme con ustedes para poder preciar y aprender más de su cultura, más de
sus danzas y quizás aprender a bailar TINKUS que tanto me encanta.
Hace un año les escribía desde
Europa, hoy lo hago desde mi natal Nicaragua: tierra de lagos y volcanes. El
próximo año quizás lo haga desde cualquier otro rincón del mundo o incluso
desde su bella tierra boliviana.
ADAF-BOLIVIA más que un símbolo
nacional, es un símbolo cultural...!
Muchas felicidades ADAF por sus
16 años de visión, acción y proyección.
Juan José CASTILLO PÉREZ Bailarín y coreógrafo profesional B.F.H.P.
Maestro de lenguas extranjeras FLE, ELE, ESL